Dieciocho de mayo de mil novecientos setenta y ocho  Soleado

Hoy el clima es muy bueno, el cielo es azul, sin una nube, y el sol brilla intensamente.

Por la tarde no tenemos clases, vamos a completar la tarea que nos dio la escuela: atrapar moscas.

Después de almorzar, tomé el matamoscas y fui a buscar objetivos en el callejón. No sé por qué, hoy hay muy pocas moscas, después de un buen rato solo he atrapado medio caja.

No pasó mucho tiempo cuando llegó el compañero Xiaowen, con un matamoscas en la mano, y me dijo: “Hoy hay especialmente pocas moscas, ¿qué pasa? ¿Aquí también hay tan pocas? Vamos a ver en el callejón tres.”

Así que ambos salimos del callejón y nos dirigimos al callejón tres, allí, más decepcionante, ni siquiera se veía la sombra de una mosca, me empecé a poner un poco ansioso: “¡Vaya! ¡Mañana hay que entregarlo, si seguimos así, ¿cómo vamos a completar la tarea?”

Xiaowen giró los ojos y mirando al cielo dijo: “Aquí hace mucho sol, vamos al callejón tres, allí hay más sombra de árboles, puede que no haga tanto sol y haya más moscas.” ¿Las moscas realmente temen al sol? Pensé mientras seguía a Xiaowen al callejón tres.

¡Ja ja! Aquí, bajo la sombra de los árboles, realmente hay muchas moscas, parecen estar descansando y disfrutando del fresco, pero son perjudiciales para los humanos, ¡hay que exterminarlas!

Tomamos los matamoscas, “¡Pah! ¡Pah! ¡Pah!”, y en poco tiempo atrapamos una caja, ¡hemos completado la tarea con éxito!

El sol brilla intensamente, como nuestro estado de ánimo en este momento.

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