Zewang, el líder, vivió hasta los 79 años y falleció en 1965. Durante su vida, cuidó con esmero la casa de estilo tibetano de su familia, porque más tarde supo que los "líderes del Ejército Rojo" que se alojaron en su casa eran Mao Zedong, Zhou Enlai y Zhu De, y también entendió que la reunión que los "líderes del Ejército Rojo" llevaron a cabo en su casa tenía un gran significado, llamada "la Conferencia de Luohua" —

El 18 de julio de 1935, se celebró en la casa de Zewang la "Reunión del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China", a la que asistieron Zhu De, Luo Fu (Zhang Wentian), Zhang Guotao, Zhou Enlai, Mao Zedong, Bogu (Qin Bangxian), Wang Jiaxiang, Kaifeng y Deng Fa, un total de 9 personas. El entonces secretario general Zhang Wentian presidió la reunión y propuso opiniones sobre la disposición del personal: "El Comité Militar establecerá un comandante en jefe, el camarada Guotao asumirá el cargo de comisionado político y será el responsable del Comité Militar. El Comité Militar tendrá un pequeño comité militar (miembros permanentes del Comité Militar), que antes era de 4 personas, ahora se incrementa a 5, el camarada Chen Changhao se une, y el principal responsable seguirá siendo el camarada Guotao. El camarada Enlai será trasladado al trabajo del Comité Central, pero mientras el camarada Guotao no esté familiarizado, Enlai le ayudará temporalmente. Esta es la división de trabajo del Comité Militar."

Cabe mencionar que en la casa de Zewang, Xu Xiangqian (entonces comandante del Ejército Rojo de la Cuarta Frontera) conoció por primera vez a los líderes centrales Mao Zedong, Zhou Enlai, Zhu De, Zhang Wentian, entre otros. Propuso activamente trasladar a algunos funcionarios del Comité Central al Ejército Rojo de la Cuarta Frontera para que asumieran cargos de mando, y trasladar a más de 3,700 personas de los tres regimientos del Ejército Rojo de la Cuarta Frontera para reforzar al Ejército Rojo Central, con el fin de que ambos ejércitos aprendieran mutuamente y se complementaran. El Comité Central del Partido Comunista aceptó la sugerencia de Xu Xiangqian. Mao Zedong preguntó a Xu Xiangqian sobre la situación del enemigo y le dijo: "En el futuro, el Ejército Rojo de la Primera y Cuarta Frontera debe, bajo la dirección unificada del Comité Central del Partido, aprender mutuamente y unirse estrechamente para cumplir con las tareas que el Partido les ha encomendado." Mao Zedong también otorgó a Xu Xiangqian una medalla de oro de cinco estrellas en nombre del Gobierno Central Soviético Chino, en reconocimiento a su contribución al Ejército Rojo de la Cuarta Frontera. Esto animó mucho a Xu Xiangqian y a los combatientes del Ejército Rojo de la Cuarta Frontera.

Aunque Zewang no conocía el contenido específico de la "Conferencia de Luohua", nunca olvidará cada detalle de la vida y las reuniones de los "líderes del Ejército Rojo" en su casa; nunca olvidará a Mao Zedong, Zhou Enlai y Zhu De pidiéndole prestado un hacha, trabajando en el campo junto a los campesinos tibetanos y los soldados del Ejército Rojo para cosechar la cebada; nunca olvidará lo que Mao Zedong le dijo mientras le estrechaba la mano: "Te agradezco mucho por tu ayuda al Ejército Rojo, después de liberar a la sufrida población de toda China, también tendrás tu parte de mérito." Por ello, considera la casa donde se alojaron los "líderes del Ejército Rojo" como un santuario y los recuerdos que le regalaron como objetos sagrados, cuidándolos con esmero.

En 1952, Zewang cumplió 66 años y sintió que su salud se debilitaba, por lo que convocó a su familia a sentarse alrededor de la mesa donde se celebró la reunión de los "líderes del Ejército Rojo" y solemnemente le encomendó a su hijo Wang Zha, que ya tenía 33 años, la tarea de proteger el sitio de la "Conferencia de Luohua". Zewang le explicó a Wang Zha: "Después de que el Ejército Rojo se fue, fui rechazado y malinterpretado por algunas personas 'anti-Rojo', pero finalmente resolví estos conflictos con mis principios de vida. Para proporcionar alimentos al Ejército Rojo, prometí a la gente: 'Si el Ejército Rojo no devuelve, yo devolveré', y para cumplir esta promesa, me tomó tres años pagar casi todos los alimentos y artículos. Pero todo lo que he dado es para buscar la verdad y apoyar la verdad. Las generaciones futuras deben recordar siempre que nunca se debe reclamar lo que he dado. De lo contrario, se enterrará el mérito que he hecho por apoyar la verdad. Recuerda, el mérito no se puede comprar con dinero."

Zewang también compartió con toda la familia algunas historias relacionadas con el Ejército Rojo:

El 23 de julio de 1935, Zewang envió al Ejército Rojo hacia la dirección de Maerga, y el 25 de julio se despidió del Ejército Rojo en Xiadagu. En ese momento, no sabía que en el camino de regreso a casa, en las áreas de Changde y Shashi, algunos "personas anti-Rojo" ya habían preparado emboscadas, listos para "eliminar" a los "traidores" tibetanos que ayudaron al Ejército Rojo. Sin embargo, cuando se dieron cuenta de que la persona que entraba en la emboscada era Zewang, todos se quedaron atónitos, nadie se atrevió a moverse, y miraron impotentes cómo Zewang y su séquito pasaban por la emboscada. La razón principal es que todos conocían la historia legendaria del padre de Zewang: el padre de Zewang se llamaba Peng Chu, era una persona recta y hábil en artes marciales, y era un pequeño líder bajo el mando del líder de la región de Heishui. En la localidad había dos matones notorios, uno llamado Langsu y el otro Wazha, que eran hermanos, y que a diario no dudaban en usar cualquier medio para pelear por tierras y propiedades, oprimían y maltrataban a la gente, causando estragos en la región, y la gente se atrevía a enojarse pero no a hablar. El líder Peng Chu y otro líder llamado Shidala decidieron eliminar a estos malhechores. Finalmente, un día atraparon a Langsu y Wazha para interrogarlos, y Shidala le dijo a Langsu: "Hoy es natural que yo esté arriba y tú abajo, te estoy interrogando, debes responder a mis preguntas." Langsu, arrogante, dijo: "Estoy acostumbrado a sentarme arriba, no hablaré desde abajo, si quieres que responda a tus preguntas, debes sentarte arriba y yo abajo." Así que Shidala y Peng Chu dejaron de interrogar y condenaron a muerte a Langsu por su obstinación. Wazha ya había sido herido por Peng Chu en la batalla, sintió que su hora había llegado, así que le dijo a Peng Chu: "He hecho demasiadas cosas malas, debería morir, el Buda Shakyamuni también me ha dicho que estoy enfrentando un desastre. Pero tengo una petición, déjame morir mirando hacia el este, porque desde que nací, siempre he mirado hacia el este." Peng Chu accedió a su petición, lo hizo mirar hacia el este y pidió a una persona que había sido oprimida por él que le cortara la cabeza.

Zewang dijo que esos "personas anti-Rojo" aún respetaban a su padre, el líder Peng Chu, y también temían a la familia de Peng Chu. En realidad, Zewang también tenía preocupaciones: "¿Y si esas personas no me reconocen y abren fuego? Las consecuencias serían inimaginables. Sin embargo, si realmente diera mi vida por el Ejército Rojo, tampoco me arrepentiría. Vale la pena. Esa es mi gloria, es la gloria de nuestra familia."

La segunda historia que Zewang compartió con toda la familia fue durante la Guerra de Resistencia contra Japón (1941-1942), cuando escuchó que el Ejército Rojo había crecido y se había reorganizado en el Octavo Ejército y el Nuevo Cuarto Ejército, y que el Partido Comunista y el Kuomintang se habían unido para luchar contra los japoneses, se sintió muy feliz, pensando: "Ya sabía que el Ejército Rojo estaba haciendo grandes cosas, ¡definitivamente tendrá éxito!" Así que, en representación del pueblo tibetano de la región de Heishui, se esforzó y viajó dos veces a Chongqing para donar 2,000 yuanes en plata y otros suministros para la resistencia contra Japón. El gobierno del Kuomintang quería otorgarle el rango de general de brigada, pero él lo rechazó. No quería ser funcionario ni enriquecerse, solo tenía un deseo simple y sincero: esperar que el Ejército Rojo de aquel entonces tuviera éxito en la revolución lo antes posible, para que pudiera volver a Heishui, ver, quedarse un tiempo, beber vino de cebada con él, y charlar juntos... Hasta su muerte, permaneció silenciosamente cuidando la pequeña casa de estilo tibetano en el pueblo de Luohua en Heishui, esperando con ansias...

El Ejército Rojo de aquel entonces no volvió. No. Pero la escena de Mao Zedong y Zhu De participando personalmente en la cosecha de cebada, Zhou Enlai trabajando en el patio a pesar de estar enfermo, y Deng Xiaoping movilizando a los tibetanos en las aldeas para recolectar alimentos... Todo esto quedó grabado en el corazón de Zewang y su familia, tienen muchas cosas que no pueden olvidar, demasiadas cosas que no pueden olvidar...