¿Para un hombre, qué es más importante, los padres o la esposa? Esta es, de hecho, una difícil cuestión. Los padres nos dan la vida y nos crían, su bondad es inmensa; mientras que la esposa es nuestra compañera elegida de por vida, con quien compartiremos la mayor parte de nuestra vida, construiremos un hogar y criaremos a nuestros hijos. Sin padres no existiríamos, pero sin esposa, nuestra vida también perdería a su compañero más importante.
Las elecciones y consecuencias en la realidad
En julio de 2016, el pueblo de Daxian en Xingtai, Hebei, fue golpeado por una inundación. El aldeano Gao Fengshou, cuando llegó la inundación, corrió inmediatamente a la casa de su madre y la llevó al techo. Cuando regresó para cuidar de su esposa e hijos, la inundación ya había cubierto todo el pueblo. Afortunadamente, su esposa e hijos finalmente estaban a salvo, pero Gao Fengshou "los perdió" —su esposa no quería hablarle y se mudó con los niños a un punto de reubicación a 10 kilómetros de distancia.
Esta historia muestra la crueldad de enfrentar tal elección en la vida real. Gao Fengshou eligió salvar primero a su madre; su elección tiene su razonabilidad, pero también pagó el precio de la ruptura de su relación matrimonial. Su esposa lo despertó cuando llegó la inundación y, después de que él se fue, salvó sola a sus dos hijos y al padre de Gao Fengshou. Ella tiene todo el derecho de sentirse traicionada y decepcionada.
Los internautas iniciaron un intenso debate sobre este asunto; algunos dicen que Gao Fengshou es un gran hijo, y que la decisión de su esposa de llevarse a los niños es cruel y despiadada; otros dicen que él es indiferente hacia su esposa e hijos, extremadamente insensible. Pero en realidad, en momentos de desastre, es difícil para las personas mantener una mente racional y tranquila. Los forasteros no tienen derecho a "juzgar" las elecciones de las personas afectadas por el desastre.
Perspectiva legal y ética
Desde el punto de vista legal, cuando la madre y la esposa caen al agua al mismo tiempo, la obligación de rescate debe ser juzgada de manera integral según las disposiciones relevantes del Código Civil y las circunstancias reales del lugar. En el caso de la madre, los hijos adultos tienen la obligación legal de cuidar y ayudar, que incluye la responsabilidad de rescate en situaciones de emergencia; en el caso de la esposa, hay una obligación mutua de apoyo entre cónyuges, que también incluye la responsabilidad de rescate.
El Código Civil establece claramente que el derecho a la vida debe ser protegido de manera equitativa, pero no especifica que se deba priorizar a una parte sobre la otra, y debe manejarse de manera flexible según las condiciones del lugar (como la distancia, la dificultad del rescate, etc.). Si, debido a limitaciones objetivas (como solo poder salvar a una persona), se produce un daño por no rescatar a la otra parte, generalmente no se perseguirá la responsabilidad legal, ya que se considera una emergencia o fuerza mayor.
Sin embargo, si hay una intención de no rescatar o una negligencia grave (como saber que se puede rescatar a ambas partes y optar por no hacerlo), puede ser necesario asumir responsabilidad civil e incluso penal. La ley no establece de manera obligatoria "a quién se debe priorizar en el rescate", pero exige cumplir con la obligación de rescate hacia ambas partes.
Prioridades en la relación matrimonial
En las relaciones familiares, cómo organizar razonablemente el orden de prioridad entre la esposa, los hijos y los padres es un tema que requiere reflexión profunda.
La relación entre cónyuges debe ocupar el primer lugar. El matrimonio implica un compromiso, ya sea en términos económicos, responsabilidades familiares compartidas o apoyo emocional. La esposa no solo es una compañera de vida, sino también la base del hogar. Enfrentando pruebas o desafíos importantes en la vida, la esposa suele ser el apoyo más confiable. El vínculo emocional entre cónyuges es una garantía importante para la felicidad en la vida.
Los hijos ocupan el segundo lugar. Los hijos son el fruto del amor entre ambos cónyuges y la esperanza del futuro. Sin embargo, es importante notar que el exceso de indulgencia hacia los hijos a menudo puede llevar a la pérdida de equilibrio dentro de la familia. Solo en un contexto de estabilidad en la relación conyugal se puede lograr verdaderamente la felicidad familiar.
Los padres ocupan el tercer lugar. En cada etapa de nuestro crecimiento, los padres han dedicado una gran cantidad de tiempo y esfuerzo. Sin embargo, a medida que entramos en el mundo de los adultos, el papel de los padres se transforma gradualmente en el de apoyo, y ya no son nuestra principal dependencia. El respeto, la gratitud y la compañía son la mejor manera de retribuir a los padres, y no es necesario poner sus necesidades en la posición más prioritaria.
El Sr. Wu Jun expone un punto de vista similar en su libro "Conocimiento": en un matrimonio perfecto, ambas partes deben entender que el grado de intimidad y la importancia de las relaciones son, en orden, "los cónyuges tienen prioridad sobre los hijos, y más aún sobre los padres de ambos". Si se reconoce esta prioridad, la cuestión de si salvar primero a la esposa o a la madre cuando ambas caen al agua ya no es un problema.
Análisis del modelo de pensamiento de AA
El modo de pensar de AA muestra características evidentes del tipo A: claro en lo correcto y lo incorrecto, blanco y negro, se aferra a los principios, valora las reglas y el orden. Las personas del tipo A tienen una fórmula de juicio de valor en su mente, y tienden a pensar en los problemas utilizando esta fórmula. Se apegan a la visión de valores dominante en la sociedad, careciendo de experiencia en el mundo real y en su propia interioridad.
Este modo de pensar puede ser efectivo en situaciones simples, pero en relaciones familiares complejas y problemas emocionales, a menudo resulta rígido e impráctico. La insistencia de AA en que "solo hay una madre, pero se puede cambiar de esposa" refleja su apego a la tradición del filialismo, pero su comprensión de la esencia del matrimonio es bastante unilateral.
Las personas del tipo A consideran los problemas de manera meticulosa y detallada, siendo llamadas "pensadores". Sin embargo, a menudo se apegan demasiado a los principios, y a veces no son necesariamente muy científicos. Además, debido a su excesiva obstinación, se someten a una gran presión y fatiga. Además, si no actúan de acuerdo con sus propios principios, experimentan una fuerte culpa.
Este modo de pensar puede encontrar dificultades en el matrimonio, ya que la relación matrimonial requiere flexibilidad, tolerancia y comprensión de los sentimientos del cónyuge, en lugar de principios rígidos y juicios en blanco y negro.
Posicionamiento de roles en el matrimonio
En el matrimonio, generalmente hay seis roles: "hombre", "mujer", "niño", "niña", "padre" y "madre". La combinación de estos seis roles genera cuatro modelos de matrimonio: hombre y mujer; niño y madre; niña y padre; niño y niña.
Si el esposo en casa es en su mayoría un "niño", la esposa solo puede desempeñar el papel de "madre". Cuando se cansa de hacerlo, si no tiene oportunidades a largo plazo para ser una niña o una mujer, puede buscar a un hombre o un padre fuera de casa.
El modo de pensar de AA indica que puede estar más en el rol de "niño", necesitando el cuidado y reconocimiento de su madre. En este caso, puede ser difícil para él asumir el rol de esposo maduro y no puede colocar a su esposa en la posición adecuada, lo que lleva a un desequilibrio en la relación matrimonial.
¿Es AA adecuado para el matrimonio?
Basado en el actual modo de pensar de AA, puede que aún no esté preparado para entrar en una relación matrimonial saludable. El matrimonio requiere una mentalidad madura y un compromiso con la pareja, no una visión que coloque a los padres por encima del cónyuge.
Si AA insiste en la idea de "el dinero debe gastarse en mi madre, no en mi novia", entonces será difícil que se convierta en un esposo calificado en el matrimonio. El matrimonio implica formar una nueva unidad familiar, en la que la relación entre cónyuges debe ser el núcleo, y no seguir colocando la relación con la familia de origen en primer lugar.
Sin embargo, esto no significa que AA esté destinado a no ser adecuado para el matrimonio. A través de la auto-reflexión y el crecimiento, puede ajustar completamente sus valores y prioridades, aprendiendo a respetar a sus padres mientras coloca a su esposa en la posición adecuada.
Cómo equilibrar la relación entre padres y esposa
Equilibrar los roles e importancia de la madre y la esposa en la vida es un requisito previo para asegurar la felicidad y armonía en el matrimonio.
Definir responsabilidades y roles: Después de casarse, el enfoque de la vida debe ir gradualmente hacia la pequeña familia, tú y tu esposa se convierten en los principales pilares del hogar, planificando juntos el futuro. El hombre debe mantener siempre la claridad, definir sus responsabilidades y roles, y no entregar fácilmente el control financiero a su madre.
Comunicación y negociación: Ambas partes deben discutir abiertamente sus roles y responsabilidades en la familia, dividiendo razonablemente las tareas del hogar, la crianza de los hijos y el cuidado de los ancianos, según la naturaleza del trabajo y los hábitos de vida de ambos.
Organizar el tiempo de manera razonable: Definir las prioridades de los objetivos personales y las necesidades familiares, haciendo arreglos razonables en diferentes etapas. Utilizar técnicas de gestión del tiempo para mejorar la eficiencia en el trabajo y las tareas del hogar, aumentando el tiempo para acompañar a la familia y para el desarrollo personal.
Mantener la independencia personal: No renunciar a los intereses y pasatiempos personales debido a las responsabilidades familiares, y programar tiempo regularmente para participar. Mantener el contacto con amigos y colegas, organizar reuniones o participar en actividades regularmente, expandiendo la red social y enriqueciendo la vida personal.
Espacio personal y responsabilidades familiares en el matrimonio
El matrimonio es un viaje que dos personas gestionan juntas, que lleva tanto la calidez y responsabilidad familiar como el crecimiento y la libertad personal. Equilibrar el espacio personal y las responsabilidades familiares en el matrimonio es un tema importante.
El espacio personal es la fuente de respiración en el matrimonio: el espacio personal no solo se refiere a la soledad física, sino también a la libertad psicológica y emocional. Permite a cada persona mantener su individualidad en el matrimonio, perseguir sus intereses y desarrollar su círculo social.
Las responsabilidades familiares son la base del matrimonio: las responsabilidades familiares incluyen responsabilidades económicas, tareas del hogar, crianza de los hijos y apoyo emocional mutuo. Un hogar estable y armonioso requiere el esfuerzo conjunto de ambos cónyuges para asumir sus respectivas responsabilidades.
Encontrar un punto de equilibrio a través de la comunicación: ambas partes necesitan comunicarse sinceramente sobre sus necesidades y expectativas, entendiendo las ideas de cada uno sobre el espacio personal y las responsabilidades familiares. A través de la comunicación, se puede encontrar un punto de equilibrio que ambas partes puedan aceptar.
Las futuras elecciones de AA
Para AA, enfrenta varias posibles elecciones:
Mantenerse soltero: Si AA no puede ajustar sus valores y sigue insistiendo en colocar a sus padres por encima de una pareja potencial, entonces puede ser más adecuado para él permanecer soltero en lugar de entrar en una relación matrimonial destinada a ser desequilibrada.
Entrar en el matrimonio pero mantener el estado actual: Si AA entra en el matrimonio pero sigue insistiendo en su punto de vista, es muy probable que esto conduzca a conflictos y desdicha en el matrimonio. Su esposa puede sentirse ignorada y no valorada, lo que finalmente puede llevar a la ruptura de la relación.
Entrar en el matrimonio después de ajustar sus valores: La mejor opción es que AA pueda, a través de la auto-reflexión y el crecimiento, ajustar sus valores y reconocer que en la vida adulta, la relación conyugal debe convertirse en la más importante. Solo así podrá establecer una relación matrimonial saludable y equilibrada.
En cuanto a si AA es adecuado para que su esposa quede embarazada y tenga hijos, depende de si puede completar el cambio de mentalidad. Si puede poner la relación conyugal en primer lugar y entender la importancia del nuevo núcleo familiar, entonces puede convertirse en un buen esposo y padre. Pero si sigue insistiendo en colocar a su familia de origen por encima de su pequeña familia, entonces tener hijos podría agravar los conflictos familiares, lo que no sería justo para nadie.
Conclusión: Hacia una visión familiar madura
La perspectiva de AA refleja una visión familiar inmadura, que puede surgir de una comprensión unilateral del filialismo tradicional o de alguna dependencia psicológica personal. En la sociedad moderna, una relación familiar saludable debe ser una relación equilibrada: respetar y agradecer a los padres, pero también reconocer la posición central de la relación conyugal en la vida personal.
El éxito del matrimonio requiere que ambas partes coloquen a la otra en una posición prioritaria, enfrentando juntos los desafíos y dificultades de la vida. Colocar a los padres por encima del cónyuge no solo dañará la relación matrimonial, sino que también puede llevar a tensiones en la relación con los padres.
Para AA, lo que necesita reconocer es que la devoción a los padres y el amor por la esposa no son una elección de "esto o aquello". Un hombre maduro debería ser capaz de respetar a sus padres mientras coloca a su esposa en la posición adecuada, logrando un equilibrio y armonía entre ambas relaciones.
Al final, la verdadera esencia de una relación familiar saludable no radica en simplemente clasificar quién es más importante, sino en entender y respetar la singularidad y el valor de cada relación, prestando la atención y consideración adecuadas en diferentes contextos. Solo así podremos encontrar un verdadero equilibrio y felicidad en los diversos roles familiares.